La Mesa Redonda Internacional de Responsabilidad Corporativa (ICAR en su denominación anglosajona) y el Instituto Danés de los Derechos Humanos (DIHR) han publicado un informe que sirve de guía sobre cómo los gobiernos pueden promocionar más y mejores prácticas de responsibiliad social corporativa a través del Plan de Acción Nacional sobre empresa y derechos humanos.
El informe establece estrategias para los líderes nacionales y administraciones que quieran incorporar en la cultura corporativa de la empresa el respeto hacia los derechos humanos a través de los Planes de Acción Nacionales. Es una medida clave que la ONU exigía a los gobiernos nacionales en su resolución aprobada el 26 de junio.
El informe incluye una serie de criterios clave que los periodistas y las organizaciones de sociedad civil deberían exigir para contar con un robusto Plan de Acción Nacional en materia de Empresa y Derechos Humanos.
Algunas de las directrices que los gobiernos deben acatar son:
- Identificar y comunicar al público su liderazgo de los planes nacionales y el proceso de implementación a llevar a cabo.
- Crear y publicar términos de referencia y una cronologia del proceso del plan nacional.
- Asignar de principio a fin suficientes recursos al proceso del plan nacional.
- Asegurar la activa participación de aquellos que se puedan ver afectados por las actividades de una empresa (stakeholders) a través del empoderamiento de aquellos que tienen menos capacidad de influir en el proceso.
- Empezar el proceso con una evaluación del sistema actual de la implementación de los principios rectores de la ONU sobre los derechos humanos y las empresas, y los marcos relacionados. El plan nacional debería estar basado en los resultados de esta evaluación.
- Aplicar los principios rectores de la ONU sobre los derechos humanos y las empresas íntegramente en el plan nacional estatal.
- Enumeración de compromisos claros dentro del plan nacional. Estos han de ser medibles, logrables, relevantes y específicos en el tiempo.
- Implementar un proceso para que la elaboración del plan nacional sea transparente, publicando borradores y aportando informes de interacción con los stakeholders.
- Identificar quién es el responsable de la implementación de los puntos de acción individual dentro del plan nacional y su seguimiento.
- Crear un marco para el análisis y elaboración de informes sobre la implementación del plan nacional una vez que esté publicado.